Aspectos Generales

Cuando se invierte, se está dando algo a alguien con el fin de obtener algo mejor. Se puede invertir de muchas formas, invertir tiempo en una relación, la inteligencia en el trabajo o los fines de semana haciendo deporte para tener una buena salud.

Se pueden encontrar distintas definiciones de inversión de economistas.

Peumans, H. (1967). “La inversión es todo desembolso de recursos financieros para adquirir bienes concretos durables o instrumentos de producción, denominados bienes de equipo, y que la empresa utilizará durante varios años para cumplir su objeto social”.

Tarragó, Sabaté (1986). "La inversión consiste en la aplicación de recursos financieros a la creación, renovación, ampliación o mejora de la capacidad operativa de la empresa".

García, Mercedes (2004). “La inversión es el proceso por el cual un sujeto decide vincular unos recursos financieros líquidos a cambio de la expectativa de obtener unos beneficios, también líquidos a lo largo de un plazo de tiempo que se denomina vida útil de la inversión”

Así podríamos citar a diversos autores más, que han dado definiciones parecidas, o con ligeras diferencias o matices, pero que en general todas vienen a decirnos que las inversiones consisten en un proceso por el cual un sujeto decide vincular recursos financieros líquidos a cambio de expectativas de obtener unos beneficios también líquidos, a lo largo de un plazo de tiempo, denominado vida útil, u horizonte temporal del proyecto.

En general, invertir es renunciar a satisfacciones inmediatas y ciertas a cambio de unas expectativas, es decir, de unas esperanzas de beneficios futuros.

Así, cuando se dice que una persona invierte su tiempo libre, por ejemplo, en el estudio de un idioma, se expresa que renuncia al disfrute del ocio a cambio de las satisfacciones (como una mejor retribución de su trabajo u otras) que le reportará el conocimiento de una nueva lengua. El antepasado que dedicaba unos días a fabricar artes para la pesca estaba haciendo una inversión: renunciaba a obtener alimentos inmediatamente a cambio de pescar más en el futuro o pescar lo mismo con menos esfuerzo.

En un concepto empresarial, las renuncias y satisfacciones se medirán en unidades monetarias por lo cual se entenderá en muchos casos por inversión todo proceso que implique unos pagos más o menos inmediatos y cobros futuros.

También se suele denominar inversión al importe de los fondos propios aportados al proyecto.

Algunos autores reservan el término inversión para actividades que requieren cantidades importantes de recursos (en relación al tamaño de la empresa) o que inmovilizan fondos por un plazo superior a uno fijado más o menos arbitrariamente (un año, por ejemplo), pero aquí no se tendrán en cuenta estas limitaciones en la definición. Se considerará inversión, para citar tres ejemplos bastantes dispares, la construcción de una nueva planta industrial, la adquisición de una máquina o las modificaciones en una mesa de trabajo y el entrenamiento del operario, necesarios para llevar a cabo una mejora de métodos.

Cobros, pagos y gastos

Para evaluar económicamente una inversión los datos básicos son los instantes en que se producen entradas y salidas de dinero y los importes de estos movimientos. Estas entradas y salidas se denominan respectivamente, cobros y pagos.

Obsérvese que se habla de cobros y pagos, es decir, de entregas y recepciones de dinero y no de ingresos y gastos, que se producen cuando alguien reconoce la obligación de pagarnos (es decir, el derecho a que nosotros cobremos) o nosotros reconocemos la obligación de efectuar un pago a otros. Salvo incidentes, las magnitudes de los cobros y pagos coinciden con las de los ingresos y los gatos, respectivamente, pero en general los instantes en que se producen unos y otros son distintos. Por supuesto, un mismo acto de entrega-recepción de dinero es un cobro o un pago según el punto de vista que se adopte.

Se ha de tener presente que los cobros y los pagos que se han de prever son los asociados al proyecto de inversión, que se superpone a una situación anterior en relación a la cual puede suponer la disminución de determinadas partidas de costes, y por consiguiente, de determinados pagos. Tales disminuciones en los pagos causadas por la realización del proyecto han de ser tratadas, como es lógico, como si fueran cobros.

Una consideración final en este punto es la de que los cobros y pagos que se han de tener en cuenta para tomar la decisión de realizar o no un proyecto o de elegir entre diversos proyectos son los cobros y pagos futuros que dependen de la decisión. Los movimientos de fondos que hayan tenido lugar anteriormente o que estén completamente determinados por decisiones anteriores son inevitables y, por consiguiente, no pueden tener influencia alguna en la decisión. Esto es claro, y sin embargo no todo el mundo procede en la práctica de acuerdo con ello.

Rentabilidad

La característica más fundamental de cualquier inversión es que su rentabilidad y su riesgo van de la mano. Como demasiados inversores han aprendido recientemente, un mercado que dobla su valor rápidamente tiene las mismas posibilidades de reducirlo a la mitad a idéntica velocidad, y una acción que sube de precio en un 90% puede descender de igual manera en un 90%. O cuando un agente de Bolsa sugiere que el precio de una acción concreta se va a disparar, lo que en realidad está diciendo es que no considera a la persona a quien lo ofrece demasiado inteligente, ya que en caso contrario se daría cuenta de que si él supiera la verdad de que el precio iba a aumentar, no se lo daría a nadie, ni a su propia madre. En lugar de eso, este individuo dejaría de inmediato su trabajo, se hipotecaría hasta el cuello, compraría tantas acciones como pudiera y a continuación se iría a tumbarse en una playa.

Elementos básicos de las Inversiones

En todo proceso de inversión se pueden distinguir seis elementos:

El sujeto inversor: es la persona física (directivo) o jurídica (sociedad mercantil) que en última instancia toma la decisión de invertir o no y que, además, debe suministrar los recursos monetarios líquidos necesarios.

El objeto de inversión: es el bien o conjunto de bienes en los que se va a materializar la inversión.

La inversión inicial: es el desembolso presente y cierto en el que hay que incurrir para llevar adelante el proceso de inversión. (El desembolso inicial se suele representar por las letras A o I).

La corriente de pagos: es el conjunto de desembolsos líquidos a los que el inversor deberá hacer frente a lo largo de la vida útil de la inversión. (Los pagos se suelen representar con la letra P). 
La corriente de cobros: es el conjunto de cobros futuros que el sujeto inversor espera obtener del proyecto de inversión a lo largo del tiempo y que confía en que le resarcirá de los costes incurridos. (Los cobros se suelen representar con la letra C ). 

El tiempo: Los elementos de la inversión (inversión inicial, cobros, pagos) están vinculados al tiempo. (La vida útil de un proyecto tiene una duración de n períodos de tiempo, usualmente años. Así, cada periodo de tiempo se representa con la letra T).

Clasificaciones de las Inversiones

Se clasifican de acuerdo a diversas consideraciones:

1. Según el objetivo de las inversiones

· Inversiones de renovación o reemplazo, cuyo objetivo es el de sustituir un equipo, herramienta, instrumento, etc., que este viejo por otro nuevo.

· Inversiones de expansión: cuyo objetivo es poder hacer frente a una mayor demanda d empresa o para ganar cuota de mercado.

· Inversiones de modernización o innovación: cuyo objetivo es mejorar la calidad de los productos o bienes ya existentes o poder producir nuevos.

· Inversiones estratégicas: cuyo objetivo es posicionar a la empresa en el mercado.

2. Según la relación entre las inversiones:

· Inversiones complementarias o dependientes: dos o mas inversiones son complementarias cuando la realización de una de ellas facilita o requiere la realización de las otras.

· Inversiones sustitutivas: la realización de una de ellas dificulta o impide la realización de las demás.

· Inversiones independientes: no tienen relación entre si y materializar una de ellas no impide la materialización de las demás.

3. Según la corriente de cobros o pagos que origina la inversión:

· Inversiones con un solo pago y un solo cobro.

· Inversiones con varios pagos y un solo cobro.

· Inversiones con un solo pago y varios cobros.

· Inversiones con varios pagos y varios cobros.

4. Según los efectos de la inversión:

· Inversiones a largo plazo: Estas son las que más tiempo toman, pero por lo general son las que brindan mejores beneficios. Las inversiones a largo plazo están relacionadas generalmente con el montaje de empresas o negocios de grandes dimensiones. Cuando alguien está creando una empresa no espera ver ganancias en el corto ni mediano plazo, sino montar una estructura que brindará sus beneficios a futuro. Un negocio grande, una empresa o una construcción se podría considerar como una inversión a largo plazo.

· Inversiones a mediano plazo: Entre los tipos de inversión podemos encontrar a las inversiones a mediano plazo. El período de tiempo de inversión en éstas de mediano plazo es un poco más largo que las de corto plazo, pero no llega a ser una inversión que implique varios años para poder ver resultados. Comprar una casa y venderla al plazo de dos años a mejor precio se podría considerar una inversión a mediano plazo. Comprar un coche y licenciarlo como taxi para ver ganancias podría considerarse también como una inversión a mediano plazo.

· Inversiones a corto plazo: Este tipo de inversiones necesita de un capital inicial, como cualquier inversión convencional. Se las denomina así porque el plazo en el que se consigue el capital nuevamente (más la ganancia) es relativamente corto. Se podría decir que una inversión a seis meses o a un año es a corto plazo. Son inversiones prácticas para cuando alguien necesita aumentar su capital y se le presenta una rápida oportunidad de negocio.

Como punto negativo se podría decir que, la mayoría de las veces, estas inversiones no representan ni le brindan al inversos ganancias extraordinarias.

5. Según el tipo de activo en el que se ha invertido

· Inversiones en inmovilizado: es decir en activos fijos (maquinaria, equipos, etc.). Suelen venir determinadas por la capacidad de absorción del mercado de los bienes o servicios producidos en una empresa, es decir, por la demanda.

· Inversiones en circulante: es decir, en activos circulantes (existencias, clientes, etc.). suelen venir determinadas por el periodo de maduración o medio de la empresa, ya que ésta, dependiendo de su ciclo de explotación, deberá asegurarse la adecuada financiación de su explotación.

BIBLIOGRAFÍA:
Flórez, Juan Antonio (2007). Creación de empresas: Proyecto de Inversión.  Ecoe ediciones. Colombia.

No hay comentarios:

Publicar un comentario